Santo Domingo - Dos menores resultaron ayer con quemaduras en sus rostros, brazos y otras partes de sus cuerpos, a causa de la manipulación irregular de un artefacto pirotécnico de los denominados “velas romanas”.
Ángel Manuel Cordero, de 15 años y Eliezer Mesa, de 8, residentes en la calle Respaldo 10 número 11 y 3 respectivamente, en el ensanche Isabelita, recibieron los primeros auxilios en la Marina de Guerra, y fueron remitidos a la unidad de quemados del hospital Luís Eduardo Aybar, donde fueron atendidos y posteriormente despachados a sus hogares.
El hecho ocurrió a las 10:30 de la mañana, cuando Ángel Manuel encontró una “vela” que la noche antes no funcionó; la abrió, desparramó el contenido en el suelo y le prendió un fósforo, provocando la llamarada que les produjo las quemaduras a ambos.
Felicia Soto, madre de Ángel Manuel Cordero, y Justiniano Mesa, abuelo de Eliezer Mesa, exhortaron a las autoridades que prohíban de forma terminante la venta de fuegos articifiales en estas navidades.
En tanto, Manuel Pereyra, presidente de la Fundación Ecológica Kyoto, a la que pertenecen los dos menores que resultaron quemados, hizo igual pedido al Congreso Nacional para que la venta de fuegos artificiales sea prohibida por mandato de ley.
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