domingo, 17 de diciembre de 2006

Evangélicos proponen presidencia de 5 años

Santo Domingo - Líderes de la comunidad evangélica nacional propusieron que en la próxima reforma a la Carta Magna se extienda a cinco años el mandato presidencial y se mantenga la repostulación presidencial para un periodo inmediatamente posterior.

La proposición fue hecha por el reverendo Reynaldo Franco Aquino y Braulio Portes, del Consejo Dominicano de Unidad Evangélica (Codue) y el Consejo Nacional de Iglesias (CNI), respectivamente.

“Creemos que la Constitución de la República debe consagrar la duración del periodo presidencial por cinco años, otorgándole al Presidente de la República la posibilidad de optar por única vez, por un periodo igual y consecutivo, siempre y cuando se cree la figura del referéndum revocatorio”, dijo Franco Aquino.

Mientras que el reverendo Portes manifestó: “Nuestra posición es la posición de Estados Unidos, un poquito más amplia, porque llegamos a considerar que el periodo en vez de cuatro años, que resulta tan corto para los gobiernos, se lleve a cinco años”

“Esto es para que el que es presidente pueda, no reelegirse, sino repostularse por un periodo más y ya: salió del campo de la presidencia, pero con –la creación- un referéndum revocatorio”.

La declaración sobre la reelección es sólo uno de los diez puntos que, a manera de decálogo, sugirió el sector evangélico en las consultas populares que se llevan a cabo para una próxima reforma constitucional.

Propugnaron, además, por la protección de la vida. “Consideramos que la vida humana es un derecho fundamental inviolable. La vida humana no puede ser vulnerada en ninguna etapa y debe ser protegida por el Estado aún desde su concepción en el vientre materno”.

En un documento conjunto, muestran su oposición al homosexualismo, y establecen su convicción de que “el Estado debe reconocer única y exclusivamente, como fundamento legal de la familia, la unión matrimonial formada por un hombre y una mujer así nacidos”.

Sostuvieron que sólo se puede otorgar la nacionalidad dominicana a todas las personas que nazcan en el país, excepto los extranjeros en representación diplomática, los que están de tránsito y los que residen aquí ilegalmente.

No podía faltar la solicitud de un preámbulo al texto de la Constitución donde se resalte que esta nación “libre, soberana e independiente” está fundada sobre la base de principios cristianos que se consagran en el lema “Dios, patria y libertad”, agregan.

A eso se suma la propuesta de la libertad de asociación y de cultos religiosos “siempre y cuando esas asociaciones y cultos actúen con apego a la moral, las buenas costumbres y los principios cristianos”.

En el acto estuvieron presentes los dirigentes políticos Licelot Marte de Barrios y Pelegrín Castillo.

El tema de otorgar la nacionalidad dominicana a los hijos de haitianos ilegales residentes en el país ha concitado la atención de diversos sectores sociales, unos a favor y otros en contra, por lo que su inclusión en la Constitución daría una respuesta definitiva

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